domingo, 25 de abril de 2010

La mona

No soy la mona Chita,
Ya quisiera
Para poder entrar a saco
En la nevera

Sin que la ropa se resista
Luego a entrarme

Para no comerme el coco
Sobre como conjuntarme
Para ir a la Selva del Asfalto
Y no desentonar, desentonando

Si eso te he parecido, te confundes
Que esté siempre de guasa
No te indica
Que no tenga una despierta cabecita

De todos modos, pintando la mona
No se gasta pintura ni pinceles
Te puedes cachondear de lo que quieres
Y decir lo que nadie mas se atreve

No entiendo en este mundo de derechos
Donde no existen las obligaciones
Porque hay que ser animal de pelo en pecho
Para que no te toquen los cojones

Si pretendes lo que quieres ir diciendo

Así que he decidido esta mañana
Que renuncio a mi condición de humana
Y me pasó al Reino Animal
(que también está fatal)

Puedo usar mi memoria de elefante
Para recordar solo, lo que sea irrelevante
Pelear como un perro callejero
Para conseguir siempre lo que quiero

Templarme al sol como una lagartija
Rebuznar sin importarme ser burra
Y cuando no me guste lo que ocurra
Comportarme podré como una hiena

No habrá para mi reclusión
Ni habrá condena
Que soy una animal muy desvalido
Y por tanto, me encuentro protegido

Pues si como persona yo dijese
En cada momento lo que debería
Metida en el trullo -esa guardería-
Estaría cada mes un par de veces

Hartita estoy, cansada de memeces
De que todos esgriman los derechos
Y nadie reconozca los deberes

Así que miau, marramamiau.
Guau, guau y Pio, pio
Como soy un animal
De todo puedo y me rio

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