Ven a tomar un café

Me he ido a pasar el Puente
con mi mochila de sueños
a lo alto de un Almendro

Y no me llamo Eloisa

Como el sol pegaba fuerte
ni cabeza protegí
con un enorme sombrero.

Que no era de tres picos

Desde mi atalaya veo
incluso lo que no quiero
ni me puede interesar.

Los habitantes de la casa deshabitada

Y como no entiendo nada
ni nada quiero saber
pues me vine de relax
Nada parece importarme

Ni siquiera no llamarme Ernesto

Y aunque la razón de esto
de haberme subido aquí
ni aún haciendolo entendí.
Me he dicho, pues si subí,
porque lo he pensado así
¿Porque no?, pues porque si

Sin ser el Si de las Niñas

Y tampoco soy Ninette
no espero a un señor de Murcia.
Creo que el Sol me está afectando
porque voy desvariando.

Los loqueros van llegando
y tratan de irme bajando
gritan: "Ya no está en edad"

Doce hombres sin piedad

Voy colocando mis Libros
entre las ramas y mirlos curiosones
van leyendo. Ellos serán
mis bibliotecarios.

En el Almendro

Me traerán los diarios
las Palomas Mensajeras.
Que por cierto, están tardando
porque les he recalcado
que solo buenas noticias
quiero recibir aquí...

Ya me he caído del Guindo.
Del Almendro no me caigo.
Aquí me he parapetado
con mis Libros, mis Razones.

No me toqueis los cojones
porque no me bajaré.
Don Quijote de la Mancha
viene ya a tomar café.