miércoles, 5 de junio de 2013

En la Ciudad Perdida

En la Ciudad Perdida
consumaban su AMOR
jugándose las vidas
a solas, a escondidas

A un lado el tiempo volaba
al otro se detenía
fuera de ellos dos
la Vida no existía.

El Sumo Sacerdote
un hombre de poder
no podía ser dañado
y ha de salvarse él.

En sus entrañas rotas
con un hijo en su seno
ella perecerá
en la Ciudad Perdida
objeto de las iras
que traiga el "que dirán"

Y las aguas del Nilo
borrarán su pecado
el Sumo Sacerdote
es un Ser venerado.

Él no podra evitar
que maten a su Amor
y quiere acompañarla
en el destino cruel.
Apuñalado, yerto
no depende de él
que no resulta muerto.

Salido del letargo
solo queda llorar
el crudo desenlace
que no pudo evitar
En la Ciudad Perdida
vivirá el Alma amante
y ni el destino fatal
logrará separarles
porque es Amor total.

Un dios enternecido
que les ha maldecido
se apiada de sus Almas
y dentro de Mil años
dejará que se encuentren
y aunque parezca extraño
cuando se reconozcan
su Amor es para siempre.

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